Si hubo un personaje televisivo en aquel inicio del boom de las series de televisión que supo enamorar a su público, ese fue Veronica Mars. Aquella pequeña rubia adolescente que usaba su tiempo libre como ayudante de detective para su padre, cargada de ironía, sarcasmo y miles de referencias a la cultura popular, supo hacerse un hueco en el corazón de todos los que seguíamos sus andanzas.
Que por desgracia no éramos demasiados.
Y eso llevó a que la serie fuera cancelada. Probablemente una de las cancelaciones más dolorosas que recuerdo, y que dolió a todos y cada uno de los que veían la serie. Con aquel final, además. Pero Veronica Mars nos encantaba y se convirtió en una pequeña joya, en una pieza de culto, y años después su creador, Rob Thomas, hizo historia al conseguir la financiación para hacer una película del personaje a través de un crowfunding.
Veronica Mars volvió (The bitch is back, rezaba uno de los eslóganes publicitarios) y lo hizo para satisfacer aquel ansia de quienes nos habíamos quedado colgados con la serie. Resolviendo las dudas que quedaron en el aire, hilando tramas, y obsequiándonos con algo más de hora y media de ella. Veronica Mars. Larga vida a Kristen Bell.
Aparte de la película, Rob Thomas tenía intención de seguir dándole cuerda a nuestra querida detective. Hasta la fecha se han publicado dos novelas, la primera de ellas esta que nos llega a España con el título de El concurso de los mil dólares (una traducción que al menos concuerda con el libro, a pesar de que el original vendría a ser “la línea de bronceado de los mil dólares”, dado que el concurso al que referencia premia con mil dólares a la chica cuya línea de bronceado resulte más sexy).
Y no, no os he hecho un spoiler porque lo cierto es que el libro se titula así como podría haberse titulado “El BMW azul” o “fiesta de primavera en Neptune”. El concurso que da título a la novela tiene poca importancia, realmente.
Dicho eso: ¿Es una buena o es una mala novela? Para mí resulta difícil juzgarlo porque, eh, tengo a Verónica entre mis manos, vuelvo a saber de ella, la visualizo en mi mente, y eso es suficiente. Entiendo, si consigo extraer eso de mi cabeza, que la novela en sí cuenta la historia de una detective que investiga una desaparición de una adolescente que pronto se convierte en la desaparición de dos adolescentes. Como novela negra para los amantes del género les resultará muy sosa; para jóvenes (que es el público al que va dirigida) puede que les guste si logran empatizar con esa chica protagonista de carácter curioso y atrevido…
Pero.
Aquel que haya visto la serie disfrutará mucho más de lo que cuenta. A fin de cuenta es un caso como cualquiera de los que se ha visto a los largo de sus tres temporadas. A fin de cuentas se hace mención a todos los personajes que fueron importantes en la serie (algunos más de pasada que otros, pero todos). A fin de cuentas, mantiene la esencia de la serie (algo menos sarcástica, eso es verdad, pero válida).
Para un neófito, alguien que no sepa quién es Veronica Mars, puede que la trama le guste, pero habrá momentos en que determinados personajes, que aparecen solo para una conversación pero de los que se habla como parte de una trama subyacente en el fondo, eso se les haga un poco extraño por no poder hilar los cabos.
El ritmo es ágil, la escritura es sencilla y la edición de Nocturna es buena y cuidada. Por esaparte, ningún pero. De hecho, desde aquí les agradezco de todo corazón que hayan decidido traer este libro a España, porque sinceramente nunca pensé que llegaría a mis manos. Ahora cruzo los dedos para que se animen con el segundo.
Que por cierto… cada vez que cogía el libro para leer en mi cabeza sonaba la melodía… A long time ago, we used to be Friends…